Radio Nacional más oficialista que nunca

Resulta que la nueva programación de la radio pública tiene ahora, después del virtual raje de Eduardo Colombo (Voz de Telefé y hombre de las quinielas), a Carlos Polimeni y Eduardo Anguita en la conducción de la primera mañana. El primero es conocido por sus libros y notas dedicadas al rock nacional y su militancia socialista, además desde hace años conduce un programa dedicado al cine y teatro en Canal 7 . También hace tiempo que participa en la programación de la radio oficial, ahora el hombre demuestra ser kirchnerista a ultranza.

El segundo fue militante del PRT- ERP (Partido Revolucionario de los Trabajadores- Ejercito Revolucionario del Pueblo). Protagonizó en el año '73 el copamiento de una unidad sanitaria militar que lo llevó a la carcel por varios años, cosa que le permitió obtener, a modo de indemnización por parte del Estado Nacional, 252 mil dólares (una bicoca). El tipo, hoy por hoy, se dedica al periodísmo y en la actualidad es más ultrakirchnerista que Polimeni. El día Martes a la mañana ambos hicieron una nota con el Decano de la Facultad de Arquitectura, Jaime Sorin (padre de Juampi), a quién antes de hablar le hicieron escuchar la grabación del primer programa de Marcelo Tinelli, quien fue presentado como el principal comunicador del mayor grupo de medios del país. Allí el conductor "bromeaba" con sus compañeros sobre la imposibilidad de dirigirse a alguien como negro o negrito porque ahora existe un Observatorio de Medios que controla todo y que a su vez los "amenazaba" con que si se excedían, les mandaba a Luís D'elía para que los cagaran a palos.

Con tono circunstancial y ceremonioso, Polimeni y Anguita acompañaron las definiciones de Sorín que giraron en torno a desenmascarar un supuesto complot sistemático de Clarín contra el gobierno, vía Bailando por un sueño (patético).

La continuidad del programa demostró ser una cabal repulsa a todo lo que se opusiera a los Kirchner (campo, medios, oposición, caceroleros capitalinos, etc).

Ah! olvidé decirles el nombre del ciclo, se llama "Todo Cambia", digno título para seudos periodístas que van para el lado que los lleva la corriente y para donde les pagan suculentos sueldos por sus servicios.