Carteles con olor a Szpolski y otra vez interferencias raras en Radio América

Manteniendo siempre el perfil kuasimafioso, nuestro "amigo" Sergio Szpolski salió hace unos días a desmentir por Radio Rivadavia que los carteles que le pegaron duro y parejo al Relaciones Externas y lobbista corleónico de Clarín, Jorge Rendo, estaban relacionados a su pasKin, El Argentino. Escuchen el audio acá y darán cuenta de como lo traiciona el inconsciente en el momento en que cuenta que la foto de los afiches no pertenece a su diario porque, como le aseguraron "los fotógrafos....ehh!!...perdón!... los editores fotográficos que hicieron la tapa..." pertenecía a Google Imágenes, cosa que se puede comprobar buscando la imagen que nunca estuvo.

Bueno!, pero dejando de lado esta historia de Alicia en el país, vayamos a lo que ocurrió ayer otra vez en el único ciclo no alineado al kirchnerismo que quedó en pie en la 1190 luego de la llegada de la marejada Kash.

A pocos minutos de las 18 cuando dio comienzo Contrapunto, su conductor, Martín Pittón se refirió a la gravedad que tenían las denuncias contra el Yabrán de la efedrina, los medicamentos truchos, Zanola y la estrecha relación de todas estas cuestiones con la campaña de Cristina Fernández para las últimas elecciones. A partir de allí, la señal de la emisora que ahora está en la calle Amenábar 23 se tornó inentendible. Un sonido parecido a la voz del prototipo R2D2 de Stars Wars se mezclaba con la voz del periodista y con los abruptos silencios que dejaban los cortes que desde algún lugar festejaría el omnipresente Szpolski. Las obscenas interferencias hicieron incomprensibles los segmentos más interesantes del ciclo con respecto al tema de la causa de los remedios ilegales, y también una nota con el constitucionalista Sabsay que pareció el tartamudeo de Felipe, el genial personaje de Luis Sandrini. En los comentarios del blog de M.P quedaron registradas las quejas de los oyentes. El conductor inició a principios de julio una denuncia en el Comfer, pero claro, Mariotto seguro ya la derivó al CEAMSE.

La maniobra ya es tan burda que hasta el propio Pittón y su compañera locutora ríen sin saber que hacer...que otra cosa les queda?, salvo claro, pasar el clásico de Charly, Total Interferencia.