Sinceramente da miedo lo que está pasando, después de la fatídica madrugada del voto que no fue positivo, los hechos empezaron a desencadenarse de manera vertiginosa. Una cosa es presentir enemigos y conspiraciones en el mundo exterior, y otra muy diferente es verlas en la propia tropa. El matrimonio presidencial ha entrado en una suerte de pánico y psicosis stalinista que puede derivar en cualquier cosa. Que Néstor termine puteando a su principal cómplice es terrible, quiere decir que las circunstancias lo han sobrepasado.
Escuchar ayer a la tarde a Cristina en una de sus clásicas disertaciones académicas atemporales, fuera de contexto, artificiales y enfermizas, permite observar que grado de irrealidad atraviesa la dupla gobernante. Sergio Massa es como él mismo dijo, "una rueda de auxilio" que en poco tiempo más tendrá que ser reemplazada por una que posibilite llegar a algún lado, si es que eso aún es posible. Enumeremos: el Ejecutivo hechó a los funcionarios del exiliado Cobos, nombra nuevo Secretario de Agricultura ninguneando a los Jinetes del Apocalipsis que fueron en definitiva, nos guste o no, quienes pusieron de rodillas a los K, luego le acepta la renuncia al Chirola Fernández y para rematarla, pone a un tipo que venía insinuando en privado que había llegado la hora de alejarse del Titanik, pero que se juega a la posibilidad de trepar. En el plano económico y político; la inflación no sede y el Estado se hace cargo de una aerolínea endeudada hasta el tuétanos. Como si esto fuera poco, se vienen los vencimientos de una deuda que tiene los mismos niveles que en el 2001, etc, etc. Por piedad nos detenemos acá. Mi Dios querido!!, dónde iremos a parar si se apaga Valderrama, o mejor dicho, el precio de la soja.
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