Clima enrarecido

Al parecer las cosas están bastante complicadas. Resulta que cada hora que pasa se van sumando eslabones a una larga cadena de rumores y hechos que preocupan. En un posteo anterior este blog rescató la información de inteligencia que divulgaba hace horas Jorge Asís en su portal y que hablaba de armas llegadas de Venezuela, además de militantes y cuadros dispuestos a defender al gobierno K en caso de que se complique la crisis con el campo. Su cercanía al Tata Yofre le da a la información cierto carácter posible. El tipo no es ningún bebé de pecho. La primera semana de Junio cuando llegó a su casa la comitiva que iba a allanarlo, el Tata, la recibió muy suelto de cuerpo con un "los estaba esperando muchachos, pasen, por favor". Claro, ya estaba al tanto de todo. En la nota que salió publicada en la última revista Veintitrés, sobre Yofre y las denuncias por las pinchaduras de mails, hay un apartado que cuenta que la prensa internacional recibió esta última semana un mail que plantea un cuadro político, social y económico trágico para la Argentina. En él se hace mención a la posibilidad de que sectores del campo estén armados a la espera de lo que suceda en el parlamento con respecto a la ley de retenciones. Llegado el caso, si las cosas no los favorecen y barajan la posibilidad de salir a manifestar, pretenden estar protegidos contra las fuerzas de choque, también armadas, del gobierno K. A su vez se refiere a la imposibilidad de pago de deudas, el aumento del maldito riesgo país (si lo sabrá De la Rúa), inflación, y el mal humor social. En síntesis, plantea una suerte de guerra civil. Esperemos que estas informaciones no sean más que operaciones políticas y de inteligencia, no olvidemos que nadie sospechaba un 19 y 20 de diciembre en 2001 y sin embargo recuerden que pasó. Esta vez el cuadro es otro, pero la posibilidad de choques está a la orden del día. Mientras escribo este posteo escucho en la radio que un supuesto grupo de auto convocados bombardeó a huevazos la casa de un diputado del Frente para la Victoria que votó a favor de las retenciones, un tal Alfredo Dato y otros diputados tucumanos. Esto, sumado a los ataques de productores rurales a Scioli, su mujer, y a la mismísima Presidenta, no son buenos síntomas. La verdad que el final de esta historia es incierto.