A pesar de que un informe de Unicef destaque que bajó la tasa de mortalidad infantil en el mundo, saber que en la Argentina mueren 25 menores de un año por día es una locura. ¿Cómo? ¿no estamos en el país con crecimiento sostenido a tasas chinas? ¿no batimos récords en recaudación y tenemos el puesto número uno en el top five en materia de reservas en el Banco Central?. Parece que todo eso no sirve de nada. En una de sus canciones, Pablo Milanés dice: "la vida no vale nada si cuatro caen por minuto y al final por el abuso de decide la jornada". Acá caen 25 criaturas por día, y por las calles deambulan otros tantos chicos esquivando su hora, realmente es perverso y sádico. Siiii!, afirmo que este es el cambio, pero el cambio de presidente conservador que pugna por mantener los privilegios de unos pocos a cambio de la falta de salud, educación y hambre de la mayoría. Un colega me dijo en la calle días atrás, no esperes nada de un tipo que estuvo cuatro años en el poder, nos deja a la mujer en su lugar y se va declarando que tiene 18 palos en sus arcas. Claro, 18 millones declarados, ¿y el resto?. Ah perdón! cierto que al lado de De la Rúa estamos mejor. Vamos!, no seamos hipócritas y egoístas, aunque algunos tengamos banda ancha y dos monedas para ir de vacaciones y cambiar el autito, tengamos la mínima lucidez para ver que más allá de nuestra cuadra la crisis social y económica sigue llevándose a nuestros hijos.
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