La semana pasada mientras se realizaba el tratamiento de la ley de traspasos de fondos previsionales al Estado en el Congreso, el Notero fue testigo de una escena que lo conmovió casi hasta las lágrimas. Resulta que como suele ocurrir en estas sesiones los diputados dan quórum y apenas empieza a hablar alguno se levantan y se van a la mierda, especialmente si el que expone es de la oposición. Otros, menos sociables, se quedan es sus bancas haciendo otro tipo de actividades. Por ejemplo el viernes, la pulposa Victoria Donda revisaba sus mails en una noteboock de importantes dimensiones. En otra banca, un legislador ignoto leía el diario tranquilo mientras que una bella diputada provincial espolvoreaba sus mejillas sin tapujos.
El personaje que nos compete en este caso es el diputado Claudio Morgado, quien dormía el sueño de los héroes sin mayores preocupaciones. Un periodista parlamentario le marcaba a los fotógrafos la escena y ellos disparaban sus flashes maliciosos. De repente apareció en el palco un equipo de CQC que subió para hacer algunos copetes para el programa. El movilero Diego Iglesias se paró frente a la cámara para empezar a grabar, cuando el parlamentario botón le señaló la dormida de Morgado. El pibe lo miró sonriendo y le dijo "pobre, está muerto, además no lo voy a quemar porque (con la manito derecha en el corazón) yo lo banco!". Claro! pobre Clau, con tantos laburos en el Estado que tiene como va a aguantar!.
3 comentarios:
El progresismo de Pergolini y sus empleados es el más hipócrita que existe en la televisión argentina. Te leo siempre, Maru Strauber.
El programa de Morgado con Lewin en Nacional es malísimo ¿cómo le pueden pagar por eso?. El Malevo
El progresismo argentino en decadencia permanente eh!, estas son las nuevas generaciones de nabos mediáticos, encima dedicados a la política...
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