Si entre quienes festejan y felicitan por saldar la deuda con el Club de París están en primer lugar los países interesados (Alemania, Australia, Austria, Bélgica, Canadá, Dinamarca, Estados Unidos, España, Finlandia, Francia, Irlanda, Italia, Japón, Noruega, Rusia, Holanda, Reino Unido, Suecia y Suiza; del tercer mundo ni medio), luego los economistas liberales autóctonos que tanto protegen nuestra soberanía, después los industriales "nacionales" (igual de nacionalistas que los brasileños ¿no?), y para rematar los inversores extranjeros que van a venir a salvarnos como de costumbre, es porque realmente estamos en el horno. Es una obviedad que esta jugada "maestra" del "gobierno popular"de los Kirchner es otra aberración que subestima la más mínima inteligencia, ¿si fueran una administración neoliberal? ¿que decisiones tomarían? ¿la enfiteusis?. Más allá de discursos populistas, opositores o utópicos la realidad objetiva marca que esta entrega de reservas podría haber servido para solucionar cientos de problemas urgentes que aquejan a la mayoría de nuestra sociedad y que un verdadero gobierno del pueblo no hubiera relegado nunca para satisfacer la voluntad rapiñera de los países más ricos de la tierra, hablamos de hambre, miseria, marginación, desnutrición, falta de educación, exclusión, y la lista interminable que todos ustedes ya conocen muy bien. Como dice Eduardo Galeano en Las venas abiertas de América Latina. "Imposible que de donde viene el problema llegue la solución". Este, no es un triunfo ni una solución que haya que festejar o felicitar, es lisa y llanamente la actitud de un gobierno débil entregado enteramente a los intereses de las corporaciones mundiales que dominan las finanzas internacionales para ver si puede llegar arañando al 2011. Sólo seres tan pequeños en sus ambiciones de origen estrictamente personal, como un Sergio Massa o un Hugo Moyano pueden decir sonrientes que esta tragedia es una buena noticia. Crápulas de esta magnitud son los que dejan morir chicos en las calles de la ciudad, criaturas desnutridas en el Chaco, Formosa, Salta, Jujuy y en otros puntos marginados del territorio donde no hay agua, ni luz, ni gas y menos aún salud. Estos dirigentes despiadados y maquiavélicos son los que salen a la palestra para hacernos creer que pagar una deuda con intereses usurarios a un club de viejos usureros es el relanzamiento y la buena nueva de un gobierno que defiende nuestros intereses, ¿tendremos tanta cara de boludos?.Como dice hoy el Diario Crítica, a pesar de las "encendidas críticas" de la pareja presidencial a organismos como el FMI, BID, Banco Mundial y ahora el Club, fueron los que más dinero desembolsaron para cumplir con sus pagos. Los líderes del "gobierno popular" pagaron en términos netos 17.421 millones al FMI, 2.898 al BID, 5.024 al Banco Mundial y ahora 6.706 para el Club de París (todas las cifras en millones de dólares), Cavallo un poroto!.
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