La empresa Metrovías decidió salir a pegarle directamente al gremio y a los delegados con una campaña de afiches en las estaciones de las cinco líneas de subte. Allí se acusa de actos de vandalismo y sabotaje a un pequeño grupo de representantes de los trabajadores, así como también se los hace responsables por las demoras e interrupciones en el servicio. El principal acusado es Néstor Segovia, a quién se le endilga haber evitado la salida de una formación. Los abogados de la compañia ya efectuaron tres denuncias por interrupción de servicio y daños agravados. Además se iniciaron dos causas penales. ¿Serán los empleados responsables también del desastre en el servicio en las horas pico, del mal mantenimiento generalizado, y de que en tantos años de explotación del servicio no se haya colocado aún, un sistema de refrigeración a ese infierno en el que viajamos todos?.
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