Longo, otro exiliado del "régimen" como Daniel Maldad... igual, no los vamos a extrañar!
Perfil: ¿No esperabas la decisión de la empresa de echarte?
Longobardi: Sí. Lo que no me esperaba era la repercusión ni el apoyo de la gente. ¿Sabés por qué pasé Navidad en el hotel cinco estrellas de Tigre? Porque tuve que irme de mi casa. Una demostración de cariño impresionante de gente que me llamaba o me traía regalos o tortas a mi casa. Pero se me dio vuelta todo. Estoy a las puteadas porque desde hace una semana no puedo tomar mis clases de golf sobre la Ruta 27. Y casi no veo a mis hijos.
Este segmento de la nota que publicó Fontevecchia sobre el nuevo "perseguido" del kirchnerismo, Marcelo Longobardi, demuestra hasta que punto gente como esta ha degradado nuestra profesión. Lo peor es que hay muchos colegas que sueñan con eso, con poder imitar a tipos como este y llevar ese estándar de vida lamentable. ¿Cómo puede este muchacho tan suelto de cuerpo decir lo que dice?. Un periodista que supuestamente analiza la realidad de todos los argentinos tiene que estar cerca de lo cotidiano, de la realidad de la mayoría ¿qué es eso de estar mal porque no puede jugar al golf o pasar las fiestas en un hotel de lujo porque las viejas del country donde vive se solidarizan demasiado con él?... nos estará jodiendo!! ¿no?... o una de dos, se caga en todo o es pelotudo, la verdad, no sabríamos que decirles. Nos hace acordar aquella anécdota imperdible de otra "periodista" que nunca subió a un bondi (no se la pierdan). Lo cierto es que ahora entendemos por qué el critinismo cristobalista le dio el gusto y lo echó sin más... porque sabían que gente como esta no tiene argumentos para defender nada. Estos son los analistas de la realidad social, política y económica que los argentinos supimos conseguir, como te extrañamos Bernardo!
Ah! y esto que gira entre lo desopilante y lo obsceno de este señor va de yapa para que se caguen de risa o lloren... como ustedes prefieran:
Longobardi se toma un descanso de la vorágine que conlleva ser un desempleado estelar para dialogar con PERFIL. Son las 6 de la tarde, y cuenta que está solo en su casa almorzando un sándwich y en bata. “Hoy a la mañana conocí al jardinero después de cinco años, porque venía en el horario en que estaba en la radio. ¿Podés creer? Es muy loco. El martes a la mañana salí de mi casa al centro, fue algo totalmente impensado, me sentía un empleado bancario; pude ser protagonista de lo que comunicaba: el quilombo del tránsito, por ejemplo. Estoy aprendiendo lo que es la vida sin la radio”, revela. Y vuelve a comentar lo que fue su labor en la 10 durante los ocho meses administrados por Cristóbal López: “Hemos tenido momentos de presión, pero no modifiqué siquiera un pensamiento, mi forma de opinar, la lista de mis invitados ni dejé de decir algo por estas presiones”. —¿Por qué no te fuiste antes? —Porque era mi casa. Fui a laburar el día que se murió mi mamá el año pasado. Pusimos la vida; era otra condición de trabajo, una fiesta con un equipo impresionante de veinte amigos, y no quise irme porque me gusta mucho esa emisora.
Ah! y esto que gira entre lo desopilante y lo obsceno de este señor va de yapa para que se caguen de risa o lloren... como ustedes prefieran:
Longobardi se toma un descanso de la vorágine que conlleva ser un desempleado estelar para dialogar con PERFIL. Son las 6 de la tarde, y cuenta que está solo en su casa almorzando un sándwich y en bata. “Hoy a la mañana conocí al jardinero después de cinco años, porque venía en el horario en que estaba en la radio. ¿Podés creer? Es muy loco. El martes a la mañana salí de mi casa al centro, fue algo totalmente impensado, me sentía un empleado bancario; pude ser protagonista de lo que comunicaba: el quilombo del tránsito, por ejemplo. Estoy aprendiendo lo que es la vida sin la radio”, revela. Y vuelve a comentar lo que fue su labor en la 10 durante los ocho meses administrados por Cristóbal López: “Hemos tenido momentos de presión, pero no modifiqué siquiera un pensamiento, mi forma de opinar, la lista de mis invitados ni dejé de decir algo por estas presiones”. —¿Por qué no te fuiste antes? —Porque era mi casa. Fui a laburar el día que se murió mi mamá el año pasado. Pusimos la vida; era otra condición de trabajo, una fiesta con un equipo impresionante de veinte amigos, y no quise irme porque me gusta mucho esa emisora.
1 comentario:
¡Ese Longobardi es un SORETE! ¡Lacayo de Daniel Maldad tenía que ser!
Una lástima que, al menos por ahora, solo rajen a Mongobardi y no al resto de los secuaces de Daniel Maldad: Oro, "Feinmann el malo", etc.
Lo que es peor: ya el puteador serial de "Baby Etchecolatz" va a volver a la TV por C5N con su ciclo de "puteo a los televidentes/oyentes en vivo" ¡De terror!
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