Otra vez los periodistas se olvidan de sus iguales pero se acuerdan de los cócteles, los negocios y la sanata política

Una vez más hubo que asistir al silencio cómplice de un tipo repugnante que dice ser periodista y que se calla la boca ante lo inocultable, nos referimos al despido de la colega Marcia Venegas en Canal 26. Paradójicamente este "analista de la realidad política, social y económica de la Argentina" trata todos los temas de esa supuesta actualidad menos los que tienen que ver con los intereses de la empresa para la que trabaja y por supuesto, con los que estén vinculados a los abusos patronales hacia sus compañeros, esos a los que personajes como éste, suelen olvidar cuando creen estar en una instancia superior en materia "profesional". Hablamos por segunda vez del impresentable Maximiliano "Simón Pedro" Montenegro, quien como aquel personaje bíblico que negara conocer tres veces al propio Cristo, va por la segunda negada del año con respecto al caso de despido injustificado ejecutado por su patrón ex menemista (ahora kirchnerista de la primera hora), Alberto Reinaldo Pierri. El conductor de "Plan M" repitió aquel oscuro e incómodo silencio que realizara con Pablo Micheli de la CTA, cuando el metrodelegado Néstor Segovia reiteró en cámara el pedido de reincorporación de nuestra compañera Venegas. El caradura volvió a hacerse el boludo ya de manera asquerosa sabiendo, como todos los compañeros que estaban en el piso de la señal pierrista, que Marcia tenía ayer una audiencia muy difícil en el Ministerio de Trabajo para intentar volver a su puesto de laburo, del que fue despedida injustamente sólo por defender la dignidad propia y la de sus compañeros. De todos modos decimos algo: acá no es cuestión de agarrárselas con Montenegro y estigmatizarlo, al fin y al cabo él es un producto más de esta casta insolidaria en la que nos hemos convertido. En estos días próximos a las navidades se ve como los rapiñeros de sandwiches, bocaditos, saladitos, masitas, vinitos y gaseosas light, salen a recorrer el circuito de cócteles de las empresas privadas y de las dependencias oficiales para ver que pueden picotear en materia de sorteos, encuentros con prensas, gerentes, gremialistas, y políticos de turno. Ahí se los ve desesperados por agarrar el morfi, el chupi, y a su vez estar cerca de las "celebrities" que les puedan garantizar una pautita, un canjesito, un chivito o algún contacto salvador. A esos "colegas" sangucheros, llenos de envidia, de mezquindad, de egoísmo y de individualismo berreta no se les ocurra pedirles que colaboren con la causa de algún compañero despedido o que cayó en desgracia, esos "cumpas" no participan de marchas, de actos ni de asambleas porque sienten que sus destinos están vinculados a cosas más "elevadas". Ellos tienen tiempo pero para cosas más importantes, por ejemplo, hacer esos "negocitos" y estar cerca de los poderosos para sacarles con mucho "talento", off the récord que van a cambiar el curso de la historia. Ellos ya no son trabajadores, son líderes de opinión que no pueden mezclarse con la chusma proletaria... ¿Cómo van a ir a ensuciarse las nalgas a una movilización a las puertas de alguno de esos medios en los que podrían trabajar mañana gracias a ese tipo de maniobras "inteligentes" que desarrollan todo el año?. Ellos tienen sus agendas repletas de reuniones y después quieren llegar a casita a descansar y frotarse un poquito las nalguitas con aceite de oliva y algunas cremitas. Esos tipos, a los que les hicieron creer que en la jugada individual es como se llega a algún lado, con mucha suerte te ponen un "Me gusta" en Facebook, sobre el pedido desesperado de un compañero que se quedó en la calle o que está atravesando un mal momento... ojo!... algunos ni siquiera eso. Sigan viendo en estos días, en los que continúa habiendo muchos conflictos laborales en varios medios, como esta muchachada "humanitaria" se relame esquivando el bulto y argumentando falta de tiempo para "colaborar" en asuntos tan banales. Lo más loco es que a los cinco días esos mismos muchachos aparecen en fotos pelotudas subidas por ellos mismos a la red más botona del planeta celebrando la indignidad de llevar unas vidas de mierda pero "prometedoras". Sí!! ya sabemos, fue un posteo digno de Violencia Rivas, ok!!... pero no por eso menos cierto. Salud compañeros!!