Hacer un simple zapping por el canal del Grupo Clarín, o por la televisión "pública", utilizada en estos tiempos como órgano de propaganda y difusión del kirchnerismo, da el mismo asquete. Ver a los impresentables Marcelo Bonelli y Edgardo Alfano en "A Dos Sobres" emitiendo un documental retrogrado sobre la "dictadura" de Chávez y luego cambiar de señal para escuchar como Orlando Barone, Sandra Russo y la troupe de 6,7,8 reproducen informes descarados contra Hermes Binner es la misma mierda. Acá no somos binneristas ni por casualidad, pero la metodología del oprobio barato resulta insoportable, venga de Magnetto o de Bauer. El vedettista "intelectual" Tomás Abraham no es santo de nuestra devoción ni mucho menos, pero ayer los panelistas del programa de Gvirtz pasaron una nota que le hicieron al "filósofo de bar" dos chupaculos kirchneristas de Santa Fé que la verdad, daban ganas de vomitar. Sus preguntas giraban en torno a repetir: ¿usted sabe que Binner echó a dos de sus funcionarios porque hablaron bien de la Asignación Universal por Hijo?, ¿usted sabe que Binner no paga el 82 por ciento móvil?, ¿usted sabe bla bla bla... Sólo faltó que le preguntaran ¿usted sabe que Binner es pederasta y se come a los nenes crudos?... dejen de joder muchachos! eso no es ni siquiera periodismo militante... eso es una cagada!!!. Lo que viene del ejército de la Noble ya lo conocemos bien y es repulsivo por donde se lo mire, lo lamentable es que a la otra cara de esta mentira la bancamos nosotros con nuestros impuestos. Estar envalentonados no les hace bien a los empleados del kirchnerismo, se olvidan entre sus risotadas y sobradas a la oposición progresista, como la de Pino, que la Jefa Política que los conduce les pidió mesura y humildad. En este circo de las operaciones y la "publicidad" disfrazada de periodismo hay que tener tanto cuidado con los TNbaum como con los Kabitos sueltos. El lameojetismo obsecuente es obsceno desde cualquier lado. 
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