sábado, 26 de marzo de 2016

Hasta Clarín reprocha al macrinato ser más cerrado con la prensa que el kirchnerismo

La cobertura especial que le brinda el Partido Clarín a su hijo dilecto (por ahora), Mauricio Macri, es pavorosa. Ya por momento de un rastrerismo alevoso que supera todo lo establecido, pareciera que el tipo nació de un repollo para redimir a los pueblos explotados del mundo para liberarlos de las dictaduras "populistas"... ja ajaja!... pero claro, hasta los hijos pródigos se agrandan cuando se los infla tanto, y si pueden, le clavan un puñalsito a papá por la espalda o cuando duerme. Tanto cubrir a esta logia de malandras disfrazados de "empresariado" que se instaló en Balcarce 50, que el propio Grupo fue empernado como el resto de los medios en general, sin trato preferencial como esperaban de parte de su protegido. Es que Magnetto vamos!, usted lo sabe más que nadie, en la naturaleza del escorpión está picar, y si hay alguien que sabe que los gobiernos de Alfonsín, Menem, De La Rúa y los Kirchner fueron inflados y después pinchados por la misma corporación, es un integrante de vuestra mezquina y traicionera clase social, Macri... se podrá ser políticamente inepto y desfachatado, pero no tonto!. Nadie contó que después del desastroso y discriminatorio manejo de la prensa presidencial que hizo el nestorismo y el cristinismo llegó algo aún peor, lo que confirma que siempre hay una instancia superadora para hacer cagadas. Desde el 10 de diciembre, Casa Rosada le quitó las acreditaciones a todos los canales de televisión locales, prohibiendo el ingreso a la totalidad de los camarógrafos y sus cronistas, salvo alguna excepción que se hace con canales provinciales "aliados". Tanto que nos quejamos de La Corte, bueno ahora todos lo que salga de Gobierno será transmitido por cámaras OFICIALES.. ¿les recuerda a algo?. Lo increíble es que ni Canal 7 se salvó de la decisión. Algo que tiene explicación ojo!, No es que los muchachos del PRO/Cambiemos no quieran aprovechar la señal estatal para hacer uso de ella, sino que verificó que el gremio interno que maneja la emisora del Estado le ha traído dolores de cabeza a todos las administraciones que pasaron por Figueroa Alcorta y Tagle. El mandamás de la ahora ex Televisión Pública, Jorge "Batata" Rodríguez tuvo una guerra feroz con los comisarios políticos de La Cámpora que CFK le puso en el informativo y también en el manejo de otros contenidos que dependían del despedidor y tercerizador serial Tristán Bauer. El facineroso Hernán "Sushi" Lombardi, es un gran garca pero no boludo, tomó nota de esto y aunque negoció la continuidad de los compañeros del canal que pelean por mantener la independencia del informativo, inclusive algunos pocos de la anterior gestión, pero eso si, como buen hipócrita, les bloqueó el ingreso al centro de poder por excelencia, que es la Rosada. Algo que aclaramos, no ocurrió nunca jamás de los jamases, ni con los genocidas Videla, Massera y Agosti. Si Néstor o Cristina hubieran tomado esa iniciativa les habrían dado palos por doquier, y hubiese estado perfecto. No se entiende porqué esta vez la cosa quedó en un hermetismo tan extraño. Así como a Clarín diario se le facilitó el ingreso de más acreditados y todas las exclusivas que los funcionarios dan a ellos ninguneando a todos los corresponsales de la Casa, la llegada de Obama a la Argentina mostró la hilacha del mauricismo despótico y el hombre puso en vereda a su mejor gacetillero de prensa marcándole la cancha antes de que le quieran marcar la cancha... ¿o creen que entre garcas no se garcan?. El Hijo de la Patria Contratista le dispensó a Magnetto el mismo trato que a los medios provinciales y extranjeros. Durán Barba y papá Franco le soplaron al oído a Mauricio: "nunca olvides que por más que sean nuestros congeneres, una vez acá todavía el puesto de presidente sigue siendo un "cargo menor" para "Don Héctor". Así se cedió todo el control de ingresos a las diversas actividades del "Emperador" en Buenos Aires al Servicio Secreto norteamericano y a la Embajada de EE.UU.. Para disimular la cosa, la nómina de acreditaciones para el pasado 23 de marzo fueron transmitidas por la Cancillería pero sólo como intermediaria, para disimular, la entregada de culo?. La imposición fue: "un sólo periodista por medio y con la aprobación del esquema de seguridad del milonguero Barack, está claro?, sino no vamos un carajo". Hasta circuló una anécdota insólita y tragicómica donde un cronista de prensa escrita fue rebotado porque se adujo que era buscado por la Interpol, cosa que después fue "aclarada" como un error de tipeo por parte de los yankees... raro no?. Lo grave es que la mayoría siguen sin decir nada aduciendo que no hay que pegarle al CEOgobierno por orden de las comandancias de los holding de in-comunicación permanente que esperan que la cosa se siga encaminando en el marco de sus intereses. De todos modos algunos se hincharon las pelotas por la cantidad de trabas que les metieron y salieron con los tapones de punta. Hubo bronca en el diario La Nación y especialmente en su primo mayor, Clarín. La furia por el hecho de que la gerencia del PRO/Cambiemos no haya cambiado nada, sino intensificado las prácticas "K" con un exceso de hermetismo extremo, con el amenazante agregado de regalar todo a los cotos de información extranjera, especialmente estadounidense, hizo que los jerarcas del Multimedios cada vez más "Multi", hayan decidido escribir esto, que de todos modos reproducimos antes que desaparezca, como tantas cosas que se publican hoy en Internet

Una novedad de esta semana fue la cobertura “íntima” de la visita de Barack Obama a Buenos Aires que hicieron los que manejan la comunicación del presidente argentino a través de Snapchat. En esa nueva red social, que apunta específicamente a audiencias jóvenes a través de videos cortos y fugaces, difundieron imágenes de los preparativos y realización de la recepción que Mauricio Macri brindó a su par estadounidense en la Casa Rosada. Fue la primera vez que el equipo de comunicación del presidente argentino siguió con dispositivos móviles los pasos de funcionarios y asistentes a través de Snapchat, y logró hacerlo hora-a-hora y con el tono distendido y colorido que pregona esa plataforma para dispositivos móviles. Para ver esos videos, que mostraban desde la preparación de decoraciones hasta comentarios de ministros y embajadores, y desde un saludo de la primera dama hasta el histórico ingreso de Barack Obama a la casa de gobierno, los usuarios debían acceder a Snapchat desde sus teléfonos. El resto de los medios no recibieron ninguna de esas imágenes ni tuvieron permisos para registrar esa “intimidad”. Snapchat tuvo la exclusiva y el resto de los medios digitales y televisivos intentó ingeniar formas (nada sencillas) de capturar y reproducir las imágenes para sus audiencias. El equipo de Macri cubrió el evento con “un teléfono”, que accedió a perspectivas excepcionales del acontecimiento histórico, y no se la entregó a ninguno de los canales de televisión argentinos. Ni siquiera publicó esa cobertura a través de las cuentas de Mauricio Macri o Casa Rosada en Twitter, Facebook o Youtube (salvo breves extractos). Y tampoco ofreció las imágenes a las aplicaciones para dispositivos móviles de los principales medios digitales argentinos: ni los usuarios de las apps de Clarín, La Nación, Infobae o TN. De esta novedad pueden desprenderse, al menos, sospechas sobre la disposición del equipo de comunicación de Macri de garantizar el libre acceso a información pública. La cita del presidente argentino con Barack Obama es un acto de Estado, así como lo son prácticamente todas las actividades que hace Macri desde el 10 de diciembre de 2015. La realización de una cobertura audiovisual oficial y su entrega a un medio extranjero como Snapchat, cuya plataforma no favorece la reproducción libre de los contenidos en otros medios, no es la forma más conveniente de hacer publicidad de los actos de un gobierno republicano y democrático. Lo mismo había hecho el equipo de comunicación presidencial hace pocas semanas. El 1 de marzo, con motivo de la apertura de sesiones ordinarias del Congreso, habían entregado en exclusiva a Facebook la transmisión de la llegada del presidente a la Asamblea Legislativa. El resto de los medios tuvieron que depender de las reglas de esa red social para el uso de contenidos (bastante menos laxas que, por ejemplo, las de Twitter o Youtube). A esta situación se llega, en parte, porque en el sector de la prensa aún muchos no se han acostumbrado a considerar a Facebook, Snapchat, Instagram, Twitter o Youtube como medios de comunicación, así como lo son Clarín, Telefe o radio Mitre. A la vez que compiten por la misma pauta publicitaria, compiten por tener los mejores contenidos periodísticos. Y a un gobierno no le corresponde favorecer el negocio o la cobertura de uno sobre otros; sino lo contrario. Macri es el presidente más popular del mundo en Facebook, y el nuevo Gobierno, que ya cumplió 100 días, parece muy interesado en involucrarse en estas plataformas digitales, en relaciones que tocan y exceden lo periodístico. En especial con Facebook, que es una red social para reencontrarse con amigos lejanos y también una de las siete empresas más grandes del planeta y que se expande en numerosos negocios. La Casa Rosada organizó esta semana que la pregunta de un usuario de Facebook fuera leída a Obama y al presidente argentino en una conferencia de prensa en la que sólo dos periodistas profesionales de medios argentinos fueron autorizados a hacer preguntas. Y en enero, el Gobierno ya había anunciado que se prepara para utilizar la aplicación “Facebook atwork” como parte de las reformas de modernización del Estado. Hay quienes argumentan que esas transmisiones y videos en Facebook y Snapchat correspondían a la comunicación de Mauricio Macri y no de la Casa Rosada. Sin embargo, está menos claro para quién y con qué fines trabaja el equipo que produjo estos contenidos, que a quién le corresponde difundir este tipo de actividades del gobernante. Además, la mismísimas cuentas oficiales de Casa Rosada en Twitter y Facebook, por ejemplo, se encargaron de difundir la cobertura entregada en exclusiva a Snapchat. Y en uno de esos posteos, incluso, el Gobierno promete directamente que en Snapchat “vas a poder ver momentos del día y lugares que habitualmente no aparecen en otros medios”.

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