El aparato de propaganda kirchnerista ya tiene puesto todos los cañones apuntados a la idea de empezar a imponer al Gobernador entrerrianio Sergio Urribarri como el hombre leal que permitirá a la coalición gubernamental materializar el soñado axioma "Urribarri Presidente, Cristina al Poder". Falta poco para que el sistema de medios estatal y paraestatal lo convierta simplemente en "Sergio" y empiece a ser un actor político que juegue en primera para contrarrestar a los berretas candidatos de la oposición con armados discepolianos que nos regala como ejemplo fellinesco la fórmula conformada por Francisco De Narváez y el burócrata moyanista Omar Plaini, parte de esa casta gremial asociada siempre a las patronales para joder a los laburantes. Pobre Provincia de Buenos Aires... tan lejos de Dios y tan cerca del pejotismo hegemónico. Principal distrito del país siempre castigado por el choreo y el clientelismo partidario que se alimenta de los eternos rehenes de la pobreza estructural, pero eso si, desde hace ocho años castigada con fe, con esperanza, con voluntad, con optimismo y con recitales de Pimpinela, Montaner y tipos cancheros y cojedores como "Facho" Castaña... El "Panza verde" se viene posicionando como hombre de confianza de la Jefa de Estado desde aquellas muestras de apoyo incondicional en medio de la avanzada de los jinetes del apocalipsis del "Campo" en contra de la célebre 125. El informe de ayer que subimos de 6,7,8, ciclo en el que Urribarri estuvo presente ayer por tercera vez, se recuerda aquella "gesta heroica" que hoy por hoy le permite ser el reemplazante natural de Amado Boudou para la continuidad del "Proyecto". El propio titular del Ejecutivo de Entre Ríos recordó en el ciclo de Gvirtz como el propio Néstor Kirchner, después de haberlo escuchado en ese discurso en el que estaba afiebrado en las épocas del conflicto con la nefasta "Mesa de Enlace" lo abrazó y le dijo "ahora entiendo porque Cristina me hincha tanto con vos". Hace largos meses que Urribarri acompaña a la Presidenta en todos sus viajes y es de los pocos funcionarios que tiene cercanía a la mesa chica del kirchnerato. No les extrañe que en pocos meses el antikirchnerismo corporativo, desde sus cotos mediáticos, nos referimos a Clarín, La Nación, Perfil e Infobae, entre otros, empiece a cuestionar y a encontrar trapos sucios en la figura del, por ahora, bendecido "Delfín" de CFK, visto y considerando, que al menos por ahora, no están dadas las condiciones para lograr una re-releeción de la propia Mandataria.
3 comentarios:
Hay un libro muy bueno de Perón que se llama Conducción Politica , yo creo que Cristina , lo leyó y aprendió muy bien . En ese libro el Pocho habla mucho de la sorpresa y de como se debe articular politica en el momento oportuno . En concreto no creo que Cristina muestre sus cartas 2 años antes de las elecciones presidenciales . Un abrazo . TOMÁS GIGLI .
En el 2015 hablamos Gigli, o como se llame... abrazo!
Casi se me pianta un lagrimón con el asunto de la lealtad de Urribarri......
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