El kirchnerismo nos deja algo muy interesante en esta década ganada, al menos en el ámbito de la critica a los medios que se dedican, como en cualquier otro negocio, a vendernos mercancía, en este caso esa que ellos denominan eufemísticamente, "información". Es precisamente en el marco de este nuevo lector y radiotelevidente desconfiado, por suerte, que quedan expuestas las mentiras y tergiversaciones de todos los grupos que pugnan por el poder y el dinero en nuestro país. La tapa de ayer de Clarín sobre el asesinato de la joven Angeles Rawson habla por si sola y deja en claro como "administra" esa empresa el coto de noticias que publica día a día. Por su parte Diego Gvirtz, que ya fue clarinista y ahora está teóricamente en el bando de los buenos, hace una correcta crítica en el informe de TVR que subimos sobre las barbaridades que se dijeron desde los medios antikirchneristas sobre el crimen, ¿pero saben qué? se olvidó de agregar al "maestro" de la morbosidad sanguinaria y la mentira en televisión, nos referimos a Samuel Gelblung, que así como hizo shows macabros para el Grupo Clarín, para Hadad, y hasta para Romay, ahora sigue su lógica perversa dentro de los medios paraesttales del Gobierno, que además ahora le brindan cobertura mediática sobre su inconfesable pasado procesista. ¿Alguien vio que se lo vuelva a criticar desde 6,7,8, Duro de Domar o TVR por lo que hacía desde la Revista Gente?, bueno, a las pruebas nos remitimos. El kirchnerato no sólo compra con nuestras billeteras estatales a empresarios, periodistas políticos o económicos, sino que también coopta amarillistas asquerosos vinculados a lo más rancio de la dictadura cívico, clerical y militar del '76 que es maligna cuando conviene y no tanto cuando se les compra el pase de alguno de estos asquerosos ex operadores del terror.
domingo, 16 de junio de 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario