domingo, 17 de julio de 2011

La estrategia para instalar al PRO como el partido vecinalista de la Ciudad

Si Filmus se presenta o no en la segunda vuelta es un debate para la tribuna, un buen negocio para los diarios, las radios, los canales y los analistas políticos y sanateros de siempre. ¿Que iluso puede creer que Cristina y su pequeño grupo de acción no sabía como iba a salir la elección en la Ciudad?. Punto más, punto menos, el kirchnerismo entendía muy bien que perdía por paliza. El contratado Artemio y otros muchachos "encuestadores" hacen las operaciones para la gilada y los números duros llegan a Olivos con los resultados reales. En ese marco, la señora eligió a "Daniel" porque es un dirigente que en verdad le importa un bledo, un alfil para quemar en una partida difícil sin tener luego cargos de conciencia. Por eso lo expuso, y no ocurrió lo mismo con su principal aliado, Amado Boudou. Tomada sale indemne de todo esto, el hombre de los trajes caros volverá calladito la boca a la misión de tener compinches como el asesino Pedraza en el Ministerio de Trabajo y sin ningún drama. Si las cosas quedan como están, 47 a 28 puntos, o se potencian en el balotagge, 60 y pico a 40 y monedas, a la mesa chica del kirchnerato le da lo mismo. Ambos resultados legitiman al macrismo como el partido vecinalista que sólo puede dedicarse a ingobernar la Ciudad de Buenos Aires. Cuatro años más de Macri sin hacer una puta estación de subte, de no poder solucionar el colapsado tránsito, de dejar librada al azar la educación y la salud, entre otras cosas, es más negocio que adquirir otro distrito complicado y siempre opositor a la suma total del poder K, que dicho sea de paso, ya viene bastante enrevesado. Por algo Néstor envió a la Provincia al volátil Scioli, y jamás a ninguno de los de su tropa personal. Ahí, como en la CA.B.A, el desgaste y las bombas de tiempo están aseguradas, preguntenle a Ibarra, Ruckauf o Solá si no es así. Aquí se dio la misma lógica. Mandaron al frente al senador que quiso timidamente tener un gramo de autonomía y lamentablemente olvidó que el kirchnerismo no admite independencias de ninguna índole. El que se va del libreto es degradado, denigrado y pasado a retiro inmediatamente, y además, jamás perdonado. Consulten por el caso a Rafael Bielsa, a Julio Bárbaro o a Béliz. A la Doctora Kirchner, que no tiene un pelo de tonta, le conviene que el facho de Mauricio quede recluido en "esta puta Ciudad", diría Fito. Cuantos más votos tenga mejor. Al Frente para la Victoria, con tener un número interesante en la legislatura para seguir apoyando los proyectos del PRO, le basta y le sobra. Que Macri se desgaste y se queme a lo Bonzo en el distrito más difícil del país, después de la provincia de Buenos Aires, es la mejor estrategia que se pueda tener para avanzar hacia el resto del país sin problemas, que es lo que realmente importa. Los votos del otro Daniel, el ex motonauta, están asegurados, y esa es una base sólida como para estar tranquilos de cara a octubre. La Mandataria también tiene muy claro que el panqueque Ricardito es tan inconsistente como el piloto de tormentas, Eduardo Duhalde. La única dificultad real que tiene este gobierno es que la soberbia lo supera, dejar más heridos en el camino le puede traer dificultades importantes de acá hasta las elecciones nacionales. Si se calman un poco y bajan el copete, como buenos demagogos que son cuando quieren, un ejecutivo macrista en la Capital Federal sería lo que ellos esperan, una verdadera bendición.

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