Cuando 6,7,8 le pega a los Morales Solá, a los Nelson Castro, los Van der Kooy, los Blank, los Bonelli y Alfano, los Biasatti y Santillán, a los Eduardo Feinmann, etc, etc, la verdad, da placer, que quieren que les digamos!. Uno hasta siente cierta cercanía a Sandra Russo, a Galende y hasta al ñoqui Cabito, ahora, cuando se ponen a defender la corporación kirchnerista a rajatabla, sin aceptar crítica alguna y "saltando a la yugular" de todo aquel que ose hacer la más leve crítica, aunque sea del palo, da para putearlos largo y tendido. Igual, la cosa no pasa de eso. Sin embargo, los publicistas del volátil Ricardito, como dijo el diario La Nación, mezcla de Peter Capusotto, y agregamos nosotros, del censor Tato de la dictadura, van por todo y arman un spots televisivo que da náuseas. Menos mal que ellos no van al enfrentamiento y a la crispación!!. Se imaginan si Gvirtz, santo que no es de nuestra devoción, aclaramos!, hubiera hecho una publicidad al revés, en la que el panel de 6,7,8 empezara a lanzar ante las imágenes del colorado nefasto de De Narváez, del propio Alfonsín, de Macri o de Duhalde... y!!... a esta hora los estarían lapidando en Plaza de Mayo ¿o no?. No hay nada que hacer, el reaccionarismo argento se queja siempre de las críticas y de los palos, pero cuando te la devuelven, no se andan con chiquitas, te bombardean la plaza con genocidas como el Almirante Rojas a la cabeza.
miércoles, 10 de agosto de 2011
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