Así como Bonelli hace 15 años nomas aparecía sonriente y orgulloso al lado del representante indio del FMI de visita en el país, Anoop Singh, y el neo K "Gato" Sylvestre lo festejaba (miren el informe de otro ex magnettista, Diego Gvirtz en TVR versión Kash), hoy se repiten escenas con el mismo bizarrismo junto a su nuevo compañero de "A Dos Sobres", Edgardo "Afano". Porque la verdad muchachos, que el mafioso burócrata patillista del sindicato gastronómico, Luis Barrionuevo, operador del menemato para firmar el "Pacto de Olivos" (lean esta nota imperdible al feudal Adolfo Rodríaguez Saá que toca el tema) y aquel que en lo de Bernardo "Lanata" Neustadt y el onganista Mariano Grondona predicaba que para recuperar la economía "teníamos" que dejar de robar por lo menos por dos años (como si todos fuéramos de su misma condición), sea el cronista de la realidad por vuestras pantallas manchadas de sangre es mucho... nadie les pidió tanto!. Anoche los guiños, las risotadas, la complicidad entre estos tres miserables que pedían a gritos otro 2001 con su correspondiente caos dio asco. Ojo!...nadie dice que los reclamos salariales no sean justos, todo lo contrario obvio que los son y no sólo el del impuesto a las Ganacias que es para unos pocos, pero que los represente este ladri es siniestro!. Hoy encima nos desayunamos con las millonarias ganancias que sigue teniendo el Holding, a pesar de su supuesta guerra ¿a muerte? con el Gobierno en la que nunca terminan de destruirse porque está claro, ambos se necesitan mutuamente (no se pierdan esto)... Además, claro, el Oligopolio necesita que vivamos, a menor o mayor escala, en guerra permanente para vender cada vez más, un concepto orwelliano que los dos contendientes conocen muy bien. Ni ellos ni el kirchnerismo son carmelitas descalzas, todo lo contrario. Luisito y su esposa golpeadora, Graciela Camaño, alguna vez también coquetearon con los pingüinos así que esto no es cuestión de ideologías, éticas o moralidad sino de intereses, dinero y poder. La administración K, a pesar de obtener pingues ganancias e "invertir" fortunas en sus multimedios estatales y paraestatales, hace lo mismo que el Gran Grupo Argentino, explota sin piedad a sus empleados de los medios de prensa que mantiene bajo su égida (ver acá y acá). El tema aquí es que el cristinokirchnerismo o cmo quieran llamarle, gusto o no y como ocurrió con el menemismo y el duhaldismo puede pasar, ahora ¿cómo es la historia?, ¿Clarín siempre quedará, y con mafiosos como el corleónico gastronómico, el Camaleón Scioli, o quien sea, continuará siendo "Un toque de atención para la solución argentina de los problemas argentinos?... Dios no lo permita!
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