miércoles, 6 de agosto de 2014

La aparición del nieto de Carlotto, la guita, y el miedo a perder aire lograron un "Edu" Feinmann humanista


Ayer, gracias a los festejos por la identificación del nieto número 144, precisamente el de la titular de la Asociación de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, la televisión de cable argentina nos regaló los minutos más fellinescos y bizarros de la última década: escuchar al filonazi, Eduardo Feinmann, hoy bufón del kirchnerismo, casi una suerte de Micky Vainilla del gobierno gark&pop, por supuesto gracias al "excelente" material que les proporciona adrede a los editores de TVR678 y Duro de Domar, en un lamentable converso ahora defensor de los Derechos Humanos (ver desde el minuto 55:20). Obviamente que los camporistas que no estaban en la vieja casona de la calle Virrey Ceballos y lo miraban por el canal que, a pesar de todo y gracias a la decisión de CFK le arrebataron al terrorista mediático Daniel Maldad, se cagaban de risa de la situación. Alguno hasta vocifero en un reducto cercano a Casa de Gobierno: "vieron que a estos hijos de puta de los compra más fácil que a los nuestros". Más allá de que nosotros no celebramos que de Hadad se haya pasado a su análogo Cristóbal López, quien la semana pasada siguiendo la política de despidos de su antecesor dejó a 25 compañeros en la calle, quienes ahora aguardan algún tipo de negociación favorable en medio de la Conciliación Obligatoria de Tomada (algo difícil con semejante garca, pero ojalá se dé), nos impresiona ver como el kirchnerismo ha comprado las voluntades de miserables como éste tipo. No sólo él, después se los vio al mayor colaboracionista de la dictadura que aún sigue en los medios, Samuel "Seguimos Ganando" Gelblung, hablando con Victoria Donda y otro nieto recuperado como si ahora fuese u hombre de la democracia, de libertad y los derechos individuales... que hijos de puta!!!... la verdad, no tienen cara. El otro que hace tiempo se sumó al barco del "Proyecto" fue el ex hadadista Baby "Etchecolatz".... un personaje nefasto que después de un robo donde casi lo liquidan a él y a su hijo, dio muerte a uno de los delincuentes y se transformó en un héroe de los burgueses con miedo que se parecen tanto a los fachos. Esos que se quedan en la anécdota de los afanos, secuestros, entraderas, crímenes pero nunca indagan más allá de ahí, porque saben que mucha de su indiferencia mezquina influye en las desigualdades que generan esa violencia. Si están constipados y quieren mover el vientre, escuchen esta nota de Etchecolatz con Vicky Donda, a quien a pesar de sus coqueteos con neoliberales como Prat Gay, quien fue presidente del Banco Central con Néstor Kirchner, se le debe reconocer que podría haberse quedado en el kirchnerato gozando las mieses de ser hijo de desaparecidos y andar por ahí pidiendo correctivos para canitas desmadrados como el mal educado de Juan Cabandié

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