El Gobierno de CFK tiene cada hora que pasa más contradicciones y más lameculos y obsecuentes que encima, y tal vez sin quererlo le juega demasiado en contra, ya ampliaremos sobre todo eso, los medios oficialistas, los prenseros obsecuentes, y ni que hablar de los candidatos y pelotudos varios de todos los partidos que estàn en campaña... ojo!! no sòlo del kirchnerato. Ahora queremos decir que desde aquí nos cansamos de decir que los kirchneridstas recitan la revolución nacional y popular mientras seguimos viviendo en un país donde después de 10 años en el poder la riqueza sigue quedando en manos de los mismos de siempre, inclusive los "enemigos declarados" para la tribuna burguesa que la sigue por TV, caso Magnetto y su inefable troupe de "empresarios amigos", esos que viajan en el Tango 01 con las delegaciones presidenciales para hacer negocios como hacían con Videla, Viola, Galtieri y otros tantos compañeritos de armas del milìco Milani. Obviamente que para cerrar acuerdos en beneficio propio y de sus monigotes políticos. Acá es donde hay que parar la pelota y aclarar que el nefasto Grupo Clarín , ahora con su periodista "estrella" ya en el comienzo de su declive, Jorge Lanata, ha intentado imponer este discurso, pero claro, la clase media Argentina se caga en los que se mueren de hambre, de frío, enfermedades inevitables, sea en El Impenetrable o acá a pocos kilómetros de la Capital Federal en el Conurbano Bonaerense. Ocurre que el "derrame" kirchnerista, réplica del menemista pero con Derechos Humanos, mantiene calmados a las "hordas" excluidas del sistema, entonces es ahí donde al vulgar clase media urbano, sea capitalino, cordobés, santafecino o de donde venga, igual que los que sueñan con ser burgueses desde las clases más bajas, como dice la pitonisa "Lilita" Carrió, hay que venderles el discurso mediàtico de "La Yegua", de "La Maldita", de "La Dictadora", de "La Promiscua" que elige a sus funcionarios según la estética y el sex appeal, como dijo la impresentable Laura Di Marco en varios programas de televisión. En ese barco se tuvo que subir el "gran diario argentino" ahora más que nunca ya que se vienen las elecciones y hay que ir por lo que se pueda ganar contra estaadministraciòn. Ahí es donde un supuesto periodista serio, reconocido, "audaz", e histórico editorialista del matutino de los Noble, se tiene que dedicar inevitablemente a escribir sobre las "cuestiones de alchoba" de la Jefa de Estado, citando inclusive a un vendedor de verdura, con el pedido de respeto y perdòn a todos los verduleros, como Franco Lindner, quien bancado por Fontevecchia desde "Noticias" editó un libro pestilente que se llama "Los Amores de Cristina" y que pelea cuerpo a cuerpo, en mediocridad y chabacanismo, con el texto escatológico sobre Amado Boudou, otro "santo", que por las dudas aclaramos, no es ni será jamás de nuestra devoción, que publicó otro caradura llamado Federico Mayol (lean acá nuestra crónica al respecto). Para que vean el grado de bajeza y pseuperiodismo que ahora lleva adelante Van der Kooy y sus jefes (el hombre que según toda la gente del medio sabe, jugaba sonriente al tenis con el genocida Emilio Eduardo Massera) lean este y este otro artículo análogos ambos a los textos nombrados. Ahí van a pensar un poco que si estos tipos (como Blanck ¿se acuerdan?) son los que leen la realidad argentina, estamos no al horno, sino al spiedo más infernal que nos podamos imaginar.
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