Aquí las causas del despido de Lucas Carrasco de Radio Nacional

Para variar, el "Enfant Terrible" del kirchnerismo vuelve al ruedo con otro de sus escandalitos mediáticos en los medios oficialistas. Esos quilombitos entretenidos que justifican siempre su ascendente carrera pública basada en alimentar permanentemente ese personaje políticamente incorrecto que lo llevó a la efímera fama de los medios nacionales. El entrerriano Lucas Carrasco llegó a Bs. As. para ejercer lo que el dice amar, el periodismo. Nosotros siempre le reconocimos una interesante capacidad analítica y también una contundente atracción por patear el tablero, algo que muchos deseamos concretar y sin embargo sólo dejamos en el terreno de la fantasía. Esa manía de ser "border" cada vez que se presente la circunstancia le da a Carraco un perfil atractivo que hace que varios le dediquemos de vez en cuando algún posteito, alguna notita, alguna cosita. Desde acá celebramos aquella noche en la que como militante kirchnersita se animó a decirle al caretón sistémico de Daniel Tognetti, que Amado Boudou era "un liberal payaso", cosa que escandalizó al "conductor" del ciclo y por supuesto a otros tantos kirchneristas, que trabajan de ser más kircheristas que el propio Kirchner. También vivamos aquella oportunidad en que dejó como dos boludos, igual no hacía falta mucho esfuerzo, a los periodistas del establishment guiñazuísta, María O' Donnell y Gabriel "Qom" Levinas. Antes de eso Lucas había probado suerte en la misma radio donde esta vez lo rajaron sin mayores trámites, Radio Nacional. Fue la ex clarinista, María Seoane, ahora devenida en ferviente defensora del modelo "nacional y popular", quien se encargó de jugarle una verdadera mala pasada, él mismo lo contó así en su blog República Unida de la Soja. Más adelante y en 6,7,8 el "Panza Verde" tuvo un entuerto con el "filósofo de la nada", Dante Palma, una suerte de Sócrates del Río de La Plata que conmueve las fibras más intimas del gvirtznerismo light. El muy pelandrún utilizó una chicana muy baja para neutralizar a quien parece haberle generado celos artísticos ante su audiencia platónica, mirenlo acá.  Esta vez Lucas tiró bastante más de la soga y terminó repudiado por el gremio que representa a los trabajadores de la Radio Pública. El mambo con el pibe venía mal desde hace rato, si hay algo que caracteriza al muchacho de la Mesopotamia es precisamente ser poco humilde, mal hablado, irrespetuoso y nada diplomático. Esa soberbia lo llevó esta vez a plantear, al mejor estilo Samuel "Estamos Ganando" Gelblung, algunas quejas a su operador de la FM Nacional Rock, que tendría que haber manifestado en privado. No contento con eso Carrasco se empantanó en unos reclamos contra la burocracia estatal que para él tiene empleados de más, y para rematar, se tiró contra los sindicatos... obviamente, ahí se cavó la fosa, porque en la emisora estatal, a pesar de que muchos colegas se arranquen los ojos entre ellos por horas extras, viajes, protagonismo, envidias y celos, si hay algo que existe es espíritu de cuerpo cuando alguien se les planta mal, y por las dudas aclaramos que eso no está nada mal. Si todos hiciéramos lo mismo no tendríamos un salario básico de 4 mil pesos miserables. En el segundo material que les proponemos ver desde Youtube para que no se les tilde, Lucas al frente de su ex programa, "Madrugando al mediodía", junto al cantante Zambayonny, le da pie a un cronista que estaba cubriendo la asunción del "ex" entregador de Sacerdotes del Tercer Mundo, Jorge Bergoglio, como Papa.  El movilero arranca con una sanata bastante aburrida, que con poco tacto tendría que haber dejado para el programa del neo papista Eduardo Anguita, pero no para Carrasco, que obviamente iba a requerir el lado B de esa llegada argentina a la Curia Vaticana. De todos modos lo que vino después no tiene justificativo, el tipo podría haber hablado, él o su producción, con el periodista y haberle aclarado lo que se quería de la cobertura y no hacerlo quedar como representante de una corporación de noteros que conspiran contra "genios del análisis periodístico como él". Como verán acá no somos necios, cuando alguien hace algo bien lo remarcamos, cuando consideramos que se va a la mierda lo criticamos. Muchas de las cosas que plantea este entrerriano loco tienen lógica, especialmente eso de los viejos recalcitrantes que eligen a su Monarca en Europa sin que entendamos nunca quien solventa la joda. Lo cierto es que podría haberle dado al corresponsal la posibilidad de discutirlo y no sacarlo del aire, emulando otra vez al castrense Gelblung, sin darle la opción de que se defienda. Después de todo esta historia los compañeros de Radio Nacional emitieron un comunicado de prensa, bastante careta y sobreactuado por cierto, pero no por eso inválido, donde se lo repudia por "agraviar a los trabajadores y enarbolar el discurso de los años '90", lo raro es que nunca lo hayan hecho contra el mismo Anguita, quien se encargó durante todos estos años de maltratar y usar de "che pibe" a todos sus productores y asistentes. Carrasco por su parte contó su versión, que está aquí, donde explica que la bronca con él venía porque fue a La Plata a cubrir el tema de la inundaciones sin pedir los viáticos correspondientes a todo cronista de las señales del Estado. Veremos como sigue la novela. Igual, más allá de toda esta anécdota, lo que rescatamos del Panza Verde es que ha sido uno de los pocos K que se animó a hacer autocríticas como ésta... y guarda Lucas que nosotros con Clarín, La Nación y Perfil no tenemos ni queremos tener nada que ver nunca.