"La estrategia kirchnerista del poder total es más sutil pero tiene, también, su lado oscuro. Ocurre que aquí, a la inversa que en Venezuela, no cuentan los militares. El propio Kirchner se encargó de asegurarlo con una purga nunca vista a pocas horas de asumir. ¿Qué pasaría entonces si en alguna crisis, viéndose perdida, el ala "ultra" del kirchnerismo intentara un asalto directo al poder? ¿Quiénes la contendrían? Sin Fuerzas Armadas a la vista, sólo quedarían con las armas en la mano esos piqueteros a los que Chávez no ha hecho otra cosa que financiar". Esto está tomado de una de las benditas notas que el doctor Mariano Grondona escribe para Bartolomé Mitre en La Nación. Sinceramente, este tipo no tiene (y nunca tuvo) escrúpulos. En nota con otro adalid de la democracia, Mauro Viale, sí, el relator del mundial '78, Marianito expresó que los militares fueron tan perversos con Alfonsín que ni siquiera le dieron el golpe. Increíble pero real.
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