lunes, 6 de enero de 2014

Unidad de los Trabajadores de Prensa porque las patronales opositoras y oficialistas están dispuestas a arrasarnos!

Los más de cuatro años de no hacer aportes jubilatorios y obra social por parte del Grupo Veintitrés, de los testaferros gubernamentales Szpolski-Garfunkel, emulando y hasta superando en cuanto a violaciones laborales se refiere al nefasto Grupo Clarín, nos venían marcando la pauta de que la variable de ajuste, como en toda economía capitalista, ibamos a ser otra vez los laburantes de prensa. Con o sin "gobierno nacional y popular". Esto ocurre especialmente cuando se generan estas "crisis" sociopolíticas y económicas que los gendarmes del establishment nos imponen cada 10 años para sostenerse siempre en la cima utilizando un recurso infalible: el miedo, ese que siempre disciplina a las mayorías y termina llevándolas a votar al nuevo candidato del permanente sistema desigual. Ya pasaron Alfonsín, Menem, De la Rúa, Rodríguez Saá, Duhalde y los Kirchner, y salvo la cosmética del discurso épico, todo sigue igual, diría Pity Alvarez. La guita, como reconoció la propia CFK, no el New York Times, se la siguen llevando con pala los "empresarios"... si, los de siempre, esa supuesta burguesía nacional que hizo negocios, desde Videla para acá y antes también, con todos, y que "para variar" nos promete siempre el "derrame", es decir las sobras de los más ricos, que recaerán sobre los más acomodados en el segundo anillo de estatus, esa minoría urbana que sueña con ser como Mauricio y Ricardo Fort, y después las sobras de las sobras, esas que van a parar a las mayorías y eternas clases bajas, y que suelen estar en los tachos de basura, a las que este gobierno "manzanero" les mejora la pobreza con planes asistenciales interminables pero sin permitirles jamás ser burgueses. A ver si todavía también quieren tener casa propia, agua potable, salud y educación privada, comprar y cambiar sus autos todos los años, irse de vacaciones, ahorrar en dólares, llenar la heladera, y otras miserias más del "medio pelo argentino". En nuestro caso en particular, el rubro de las comuicaciones, apenas los números apretaron un poquito en este último desgobierno de Cristina, tanto Fontevecchia, como Cristóbal López, Magnetto, Saguier y otros malandras optaron como de costumbre por empezar a cortar cabezas entre los trabajadores. Cada uno dio su "justificación", la clásica sanata ridícula de las "reestructuraciones anuales". Ante el desamparo y la desolación en la que nos dejó hace tres décadas ese grupito de cinco chorros y sus familias que se adueñaron de nuestro gremio, la UTPBA, tuvimos que optar, con la fuerzas que nos quedaban, por reconstruir un contrapoder a las pisoteadas constantes de tipos siniestros como Juan Carlos Camaño, Carlos Tomada, Martín "Sanatella" y sus acohólitos pro o antikirchneristas, para eso no tienen diferencia de ninguna índole. Así surgió el Plenario Autoconvocado de Delegados de Prensa Escrita, Radial y Televisiva que empezó a encarar la voluntad del 99 por ciento de los compañeros que quieren un sindicato que los proteja y defienda de toda esta podredumbre que amenaza con radicalizarse a medida que vayan pasando las semanas, los meses. No los queremos asustar, pero la mayoría de información que este blog recibe a través de su mail, Twitter y Facebook es aterradora. Nos informan todos los días sobre los rajes encubiertos, o directos, que en estos mismos momentos están digitando los burócratas gerenciales de los dueños de los medios en su oficinas y sin piedad alguna. Por eso alertamos muchachos, son muchísimos!!!. A lo de Perfil y Clarín (con su plan de adecuación negociado con el gobierno para echar más gente todavía)se vienen las limpiezas de Pergolini en el delincuencial Grupo Veintitrés y sus radios, están los de los Olmos/Caló en Crónica, diario y TV, junto a BAE también de los mismos fariseos, en lo poco que queda de Canal 9, en el 26 y Telecentro del perverso "Muñeco Pierri", en Canal 7, donde ya empezaron con extraños "correctivos" hacia nuestros colegas, en la infinita putrefacción que es Radio Rivadavia del dueto Cetrá/Nosiglia que a su legitimación de pagar sueldos, aguinaldos, vacaciones y todo en cuotas miserables desde hace más de 10 años, suma ahora más trabajo en negro y rajes al mejor estilo de Mauro Viale, macabros!!, en el Infobae de Hadad que ya metió la televisión y se está dando cuenta que cada vez puede hacer más cosas con menos empleados, en Radio El Mundo, perteneciente a otros ladris socios del macrismo como son Gustavo Novillo, De Martino y los misteriosos Suez, algo así como los Al Capone, Corleóne y Frank Nitti de la radiomafia argenta se habla de rajes y venta. No se quedan atrás los franquistas del Grupo Prisa que ya abrieron la nómina de "retiros voluntarios", que según nos manifestaron fuentes confiables van a ser progresivos para no levantar la perdíz, ojo ahí!. La Red y los Canales América 24 y AN24, de los menemistas Vila-Manzano, y todavía algunas acciones de "Pancho" De Narváez, aunque algunos lo nieguen desde el entorno del "Colorado", así como la Radio del Plata y 360 de Electroingeniería de la familia Ferreryra, ya empezaron su proceso de precarización que concluirá, si no estamos atentos, con varios despidos. Esa fusión de las programaciones entre la 1030 y la señal que encabezan los émulos de Magnetto: Sergio Villarruel y Bernardita Llorente, fue el puntapié inicial para la multifunción generalizada, es decir esa barbaridad de que un empleado haga solito el laburo de cinco o diez, obviamente para cobrar menos que uno porque no se respetan los convenios, mientras las tortas grosas se las llevan los patrones las estrellitas del aire, esos que no vamos a nombrar porque ustedes ya los conocen, los que el oyente medio vernáculo ha elegido como líderes de opinión que parecen transmitir desde Radio Berlín en 1939, sea desde el fundamentalismo gorila o "nac&pop"... algo de no creer porque pareciera que a estas alturas da lo mismo, aunque no sea lo mismo, preguntenle a Milani y a Carlotto si no... Hay centenares de casos más que vamos a ir desmenuzando en lo que va de estos días para que nos organicemos y poder desactivarlos antes de que sea tarde. Tenemos que dejar de lado los chiquitajes partidarios, nimiedades vedettistas, mezquindades, lucha de poderes que recién se están gestando, egos baratos, ambiciones personales o grupales, y avanzar contra los enemigos comunes que están ahí a la vista y son tres: la burocracia sindical que tiene cooptado nuestro gremio haciéndonos perder el tiempo con presentaciones judiciales y pelotudeces que son funcionales a la estrategia del fagalismo camañista, a las patronales y a sus inevitables socios gubernamentales. Esos son nuestros enemigos, que quede bien claro, y quienes nos van a plantear todos los escenarios posibles para que nos dividamos y vayamos debilitados a las paritarias que ya comienzan, igual sabemos que no lo van a conseguir. Estas serán más duras para ellos que las anteriores. Nuestro objetivo deber ser tener un gremio fuerte, poderoso, que no se deje atropellar más por ninguno de estos poderes facticos que van contra  nuestros intereses y los de la ciudadanía en general que consume mierda por todo este proceso en las sombras. Por eso compañeros, para los que les toca trabajar del lado de la corpo con "C" o con "K", un consejo, a estas alturas salir a denunciar que el macrismo o el kirchnerismo chorean  con pauta publicitaria, con subsidios, con chanchuyos inmobiliarios, con obras públicas, y otras truchadas es una verdad de perogrullo ¿o alguien tiene dudas? , no está mal hacerlo, de hecho es el trabajo que nos imponen los dueños de los medios donde trabajamos. Pero no olvidemos fogonear sobre nuestros conflictos propios. Porque no hablar de la crisis que atraviesa toda la rama de la comunicación es ocultar el trasfondo de lo que nuestros compatriotas consumen todos los días en diarios, revistas, televisión, radio, sitios web, etc. Hagamos públicas estas luchas que son fundamentales para el porvenir de la prensa, el único poder implícito que puede hacerle frente a los otros tres, que ya no son poderes de la democracia sino corporaciones al servicio de un sistema injusto, desigual y maquiavélico. 

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